A los 4 días tuvimos que ir al estudio para grabar los solos del nuevo álbum. Llegué tarde a los estudios por lo que tuve que ser el último en grabar, por los pasillos me encontré con Sho, había una conversación pendiente.
“Nino, ¿qué te paso el otro día?”
“No sé... solo fueron estúpidos pensamientos nada más”
“Nino por favor parar ya, ésto no le esta haciendo bien ni a él ni a ti, confiésale ya como te sientes”
“Sho-chan yo no sé qué hacer, él quiere a alguien que le hace sufrir, yo no quiero confesarme y que me deje” Otra vez esas malditas lágrimas volvieron a empezar a caer. “Yo no quiero que se aparte de mi lado, tengo miedo Sho-chan, tengo mucho miedo a cantar hoy”
“¿cantar hoy?”
“Mi solo, lo escribí el otro día antes de que leyeras aquella hoja o lo que fuera y me confieso en ella, por eso no quiero cantar”
“Nino, hazlo ya, canta hoy, termina con esto”
“Sho-chan yo tampoco puedo aguantar más, aunque tenga miedo, cantaré”
Me pasó el brazo por el hombro, sonrió y nos fuimos juntos al estudio.
“Gambare” me susurró con una sonrisa de oreja a oreja, ambos sabíamos que hoy fuera para bien o para mal, todo terminaría.
Cuando llegamos Aiba ya había empezado a grabar, era el típico estilo de Aiba, alegre y con mucha energía, después fue Jun, estaba claro que cada solo transmitía perfectamente la personalidad de cada uno, por lo que el de MatsuJun era sexy y sugerente. Sho fue el siguiente, su estilo estaba representado en cada palabra, cuanto más escuchas el rap de Sho más adicto te vuelves a él. Después Ohno con su solo “take me far away” un título que nos llegó a todos como una canción triste y desesperada, a mi simplemente y sin razón me llenó de esperanza. Al escuchar la canción nos quedamos todos embobados, era una canción realmente preciosa, hablaba de un amor puro y sincero que sufría por no ser correspondido, expresaba un deseo de escapar de su propia realidad para poder vivir su amor, como un grito desesperado de su alma. Fue la canción más aplaudida, el gran éxito. Me conmovió, me llenó de ganas de cantar, de valentía y coraje. Me metí en la cabina de grabación y miré a Sho que asintió, reafimándome que estaba haciendo lo correcto y deseando que Ohno no recordara la escena del otro día, sino mi confesión sería verdaderamente efectiva, sabía que en el fondo de mi corazón no quería que la escuchara. La música empezó a sonar y me dejé llevar, cuando sonaba en mis oídos sentía que era capaz de hacer cualquier cosa, que nada importaba, ella me ayudaría.
Gimmick game la representación de mis sentimientos en palabras, podía observar como Sho si recordaba la escena que la canción representaba al ver la sorpresa en su rostro, no quería mirar a Ohno, ya lo sabría, ya se habría dado cuenta, seguro que lo había hecho y al final no puedo evitarlo, en la última frase de mi canción “ Kimi no kubisuji, hora, tsuba o tsuketa.(君の首筋、ほら、唾をつけた)” donde dejaba claro que él era mío, le miré y con aquella miraba todo quedó claro, mis sentimientos finalmente fueron confesados, ya no había vuelta atrás.
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